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Miastemia ocular


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Enfermedades oculares


   10/07/2024


Miastenia ocular ¿Qué es y cómo es el tratamiento?



La miastenia ocular es una patología que provoca un debilitamiento o fatiga de los músculos oculares y, como consecuencia, la persona afectada experimenta visión doble o párpados caídos. En este post te contamos cuáles son las causas de este trastorno ocular y cómo puede tratarse. 
 

¿Qué es la miastenia ocular?

 

La miastenia ocular es un trastorno crónica que afecta al movimiento muscular de los ojos y los párpados produciendo su debilitamiento. El paciente nota sensación de ojos cansados, aspecto de párpado caído, así como visión doble o diplopía. 

 

Se trata de una patología autoinmune que se produce cuando el sistema inmunitario y los propios anticuerpos de nuestro organismo atacan por error la trasmisión de los impulsos nerviosos a los músculos lo que causa debilidad.  

 

Esta enfermedad representan el 50% de los pacientes con miastenia grave y puede afectar a personas de cualquier edad pero principalmente a mujeres menores de 40 años y hombres mayores de 60 años. 

 

Es necesario mencionar que se trata de una enfermedad con manifestaciones clínicas muy variables y que en casos más graves podría llegar a afectar a los músculos respiratorios y suponer un riesgo para el paciente. No obstante, a día de hoy tiene tratamiento con pronóstico positivo, además de que se están desarrollando nuevos fármacos para mejorar su efectividad. 

 

 

Causas de la miastenia gravis

 

Como se ha mencionado anteriormente, la causa principal de esta afección ocular se explica en el propio sistema inmunitario en donde éste bloquea los receptores de las células musculares, en concreto a los receptores de acetilcolina y a las estructuras relacionadas, lo que dificulta la activación del músculo.  

 

Por tanto, afecta directamente a estas conexiones neuromusculares necesarias para su correcto funcionamiento. 

 

Síntomas de la miastenia gravis

 

Aunque la miastenia ocular se caracteriza por debilidad y fatiga muscular, esta enfermedad puede manifestarse de diferentes formas según cada paciente. Además, suele experimentarse un empeoramiento a lo largo del día y mejorar cuando se reposa. 

 

Inicialmente puede verse afectado en exclusiva la musculatura del ojo: 

 

  • Caída de uno o ambos párpados, llamado ptosis palpebral. 
  • Visión doble o diplopía que puede ser horizontal o vertical. Mejora cuando un ojo se mantiene cerrado. 

 

A nivel general, la persona afectada también puede notar debilidad muscular en la cara, garganta y extemidades: 

 

  • Dificultad del habla (disartria).
  • Problemas para tragar sólidos y líquidos (disfagia). 
  • Afecta a la masticación.
  • Puede causar asimetría en las expresiones faciales. 
  • Puede afectar también a las piernas produciendo dificultad para caminar o tener dificultad para sostener la cabeza. 

 

¿Cuándo acudir al médico?

 

Se debe concertar una visita con el médico de cabecera para realizar un completo examen de salud si el paciente tiene los siguientes problemas: 

 

  • Párpados caídos. 
  • Dificultad para ver correctamente. 
  • Problemas para respirar. 
  • Dificultad para tragar y masticar. 
  • Problemas para caminar o para usar los brazos, así como para levantar la cabeza. 

 

¿Cuál es el tratamiento de la miastenia ocular?

 

El principal objetivo de la miastenia ocular es devolver al paciente a un estado de visión nítida y prevenir el desarrollo y la gravedad de esta enfermedad. 

 

A rasgos generales, los tratamientos recomendados para la miastenia ocular son los siguientes: 

 

  • Medicamentos inmunopresores: estos disminuyen la respuesta inmune de nuestro organismo para evitar el bloqueo de la unión neuromuscular. Para ello, los fármacos más habituales, según el tipo de paciente,  son los corticosteroides, azatioprina, clicloforfamida o anticuerpos monoclonales como el rituximab, entre otros. 
  • Inhibidores  de la acetilcolinesterasa que ayudaría a la compensación de la falta de receptores de acetilcolina. 
  • Tratamiento inmunomoduladores en casos graves: inmunoglobulinas intravenosas o plasmaféresis.

 

No existen tratamientos ni hábitos preventivos para evitar la aparición de esta enfermedad, aunque algunos estudios señalan que existe cierta relación en algunos pacientes que padecen estrés durante largos periodos con la miastenia gravis, aunque sigue sin estar del todo claro. Ante cualquier duda, es necesario acudir a un proveedor médico.  

 

 


 

 

 

 

 



Fuentes:

Academia Americana de Oftalmología: ¿Qué es la miastemia ocular?

Elsevier: Miastenia gravis ocular y factores asociados al desarrollo de una generalización secundaria. 



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