Oculoplastia

La cirugía de blefaroplastia es una de las técnicas quirúrgicas más demandadas en un servicio de oftalmología oculoplástica. Se realiza con anestesia local y sedación para la reparación de las bolsas en los ojos o exceso de piel en los párpados ya sea por una cuestión estética o no. La cirugía se puede aplicar tanto a los párpados inferiores (blefaroplastia inferior) como superiores (blefaroplastia superior).

En ectropión ocurre cuando el borde del párpado, habitualmente el inferior, está girado hacia fuera, de tal forma que se puede producir lagrimeo, conjuntivitis, ojo seco, etc. Se asocia a la laxitud de los tejidos, por lo que la técnica quirúrgica que realizará el cirujano plástico ocular está encaminada a acortar el párpado inferior.
Más información sobre qué es un ectropión en nuestro blog.

En el caso de entropión el borde del párpado, habitualmente el inferior, está girado hacia dentro, produciéndose roce de pestañas y molestias que pueden llegar a ser importantes, lagrimeo abundante, fotofobia.
Más información sobre qué es un entropión en nuestro blog.

La ptosis palpebral es como se llama en oculoplastia a la caída del párpado superior que puede afectar tanto a niños como a personas adultas, pudiendo provocar una alteración tanto estética como funcional, que podría interferir en la visión si llega a tapar la pupila. La técnica quirúrgica más empleada persigue acortar el músculo elevador del párpado cuya disfunción es la responsable de la ptosis.

La cirugía de retracción palpebral consiste en colocar el párpado en la posición correcta para proteger el globo ocular y conseguir una simetría palpebral. Este tratamiento oculoplástico se realiza en malposiciones palpebrales y en orbitoparías tiroideas. Se trata de una operación ambulatoria.

Un xantelasmas es un pequeño tumor benigno o levantamiento graso también llamado estrés de colesterol situado alrededor del párpado. Su intervención quirúrgica es muy frecuente, principalmente cuando se encuentran en el párpado superior.

El pterigion es un crecimiento anormal en la superficie ocular benigno, desde la conjuntiva que pueden causar irritación y alteración visual. Es habitual que el oftalmólogo indique cirugía.

Como consecuencia de la pérdida del ojo, además del cambio estético, puede darse una retracción del saco conjuntival y deformidades por adherencias palpebrales. Una solución eficaz ante este problema es la colocación de una prótesis ocular fabricada a medida.

Los tumores de los párpados son muy comunes y aparecen como irregularidades o bultos. Normalmente son benignos, pero en ocasiones pueden ser malignos por lo que conviene hacer un seguimiento de estas lesiones. Si encontramos un cambio en su forma, color, tamaño, notamos que sangran o que escuecen debemos acudir al oftalmólogo. Lo adecuado en estos casos es extirparlos y realizar un estudio anatomopatológico de la lesión.

Con bastante frecuencia aparecen en los párpados pequeñas lesiones que en ocasiones son susceptibles de solucionar con tratamientos médicos, pero en otras debemos recurrir a pequeñas intervenciones quirúrgicas. Entre ellas están los orzuelos, chalazión, xantelasmas, verrugas, papilomas.

Las heridas de los párpados recientes o antiguas (cicatrices) deben ser reparadas quirúrgicamente para evitar defectos estéticos o de motilidad de los párpados.

La orbitopatia tiroidea es una enfermedad de origen inmunológico que afecta al funcionamiento de la glándula tiroides, así como a componentes orbitarios, en conjunto o aisladamente. Provoca proptosis o exoftalmos (ojos saltones). La mayoría de las veces se produce por una enfermedad asociada a un hipertiroidismo, pero no siempre.

La parálisis facial, también conocida como parálisis de Bell, causa debilidad repetina y temporal en los músculos faciales. Esto produce una media sonrisa que se dibuja en solo lado de la cara y uno de los ojos no llega a cerrarse. Puede suceder a cualquier edad y se desconoce la causa exacta. En algunas ocasiones puede estar provocada tras una infección viral. Se recurre a la cirugía plástica ocular para corregir problemas del nervio facial permanente, pero es poco frecuente.

La ptosis de la ceja o ceja caída se produce cuando existe un descenso de esta estructura cercana a los ojos con respecto a su posición natural. Puede afectar a uno o a los dos ojos. Esto genera un aspecto de ojos tristes o mirada cansada. El envejecimiento natural de la piel y los músculos es la principal causa. Puede tratarse con toxina botulínica o con cirugía plástica ocular.

Los problemas estéticos palpebrales provocados por procesos como la piel caída de los párpados, las bolsas palpebrales, los excesos de piel, las cicatrices antiestéticas o la caída de las cejas entre otras, son alteraciones que pueden ser corregidos quirúrgicamente por un oftalmólogo oculoplástico. En Oftalvist algunas técnicas para tratar el envejecimiento facial sin intervención quirúrgica son:

→ Toxina botulínica: la toxina botulínica es uno de los tratamientos de estética no quirúrgicos más demandados e indicado para el e corregir la flacidez del rostro y cuello. Con dosis mínimas de toxina logramos la relajación de estos músculos, consiguiendo en el rostro suavizar la mirada, rejuvenecerlo e impedir la formación de más arrugas. Su efecto es reversible, con una duración aproximada de 4 a 6 meses.

→ Relleno de ácido hialurónico: aproximadamente el 50% del ácido hialurónico se encuentra en nuestra piel, que es nuestro órgano más grande. El ácido hialurónico es vital por tanto para nutrir e hidratar el colágeno, que es el encargado de dar firmeza a la piel. Cuanta más concentración de ácido hialurónico más joven, suave y elástica se mantendrá nuestra piel. Por tanto, este tratamiento consiste en la inyección de relleno de sustancias naturales como el ácido hialurónico.

En envejecimiento progresivo y cierta predisposición personal pueden favorecer la aparición de bolsas en los párpados superior e inferior. La cirugía plástica ocular recomendada consiste en eliminar el exceso de grasa y piel acumulados en los párpados, personalizando el tratamiento para cada paciente mediante una técnica que llamamos blefaroplastia (como ya hemos comentado anteriormente).

Resultados:

La cirugía oculoplástica trabaja alrededor del ojo con las mayores posibilidades de éxito y las mínimas complicaciones según el cada individualizado de cada paciente. Según el tipo de objetivo y necesidad (estético, reconstructivo o funcional), se trata de mejorar la apariencia de la zona de alrededor de los ojos (párpados, cejas y frente), o bien de la corrección mediante cirugía de alteraciones provocadas por traumatismos, tumores, anomalías congénitas o alteraciones causadas por el paso del tiempo.