Oftalmología pediátrica / Ojo Vago
Ojo vago o ambliopía
El ojo vago o ambliopía surge sin que se produzca ninguna alteración en la estructura del ojo. Como consecuencia de esta ambliopía se produce una pérdida de la agudeza visual significativa. Es decir, un ojo vago o ambliope no alcanza el 100% de su visión incluso con corrección óptica (gafas).
En nuestra Unidad de Oftalmología Pediátrica y Estrabismo contamos con un amplio equipo de especialistas para tratar esta patología tan frecuente en niños y que ocasionalmente también se da en adultos.
¿Por qué se produce la ambliopía?
La visión desde que uno nace se va desarrollando en los primeros meses de vida a medida que evolucionan las células visuales cerebrales. La ambliopía por tanto se produce cuando existe una falta de uso de estas células cerebrales. Es decir, el cerebro no presta atención a una de las imágenes que le llega por un ojo a fin de no tener visión doble o borrosa, favoreciendo el desarrollo de la visión en el otro ojo.
Esta patología es una de las principales causas de pérdida de visión irrecuperable en los países desarrollados. Puede ocurrir que durante la infancia el sistema visual no reciba el estímulo necesario para llevar a cabo una maduración correcta a nivel cerebral causado por múltiples factores como por ejemplo un defecto refractivo (miopía, hipermetropía, astigmatismo), un estrabismo, una catarata, o cualquier defecto que no permita recibir al ojo una imagen suficientemente nítida.
La ambliopía afecta aproximadamente al 4% de los niños y si no se trata preferiblemente antes de los ocho o nueve años de edad da lugar a un severo defecto visual.
Además, su corrección se vuelve más complicada a partir de los primeros años de la adolescencia.
Diferencias entre ambliopía y estrabismo
Con frecuencia se suelen confundir los términos de ambliopía y estrabismo. Cuando se habla de ojo vago o ambliopía, las personas suelen pensar que se trata de una desviación o desalineación de los ojos, sin embargo, eso es el estrabismo. Es decir, aquellas personas con ojos bizcos o cruzados. Cuando un ojo se desvía en la dirección contraria al otro ojo, se trata por tanto de un caso de estrabismo.
El ojo vago es la pérdida de la visión o baja visión en uno o ambos ojos. No obstante, una desalineación de los ojos (estrabismo), sí puede provocar la ambliopía (ojo vago).
Tipos de ambliopía
Ambliopía estrábica
Cuando los dos ojos no están perfectamente alineados, el cerebro no puede utilizar las imágenes ya que las percibe alineadas. Para ello, el cerebro no presta atención a una de las imágenes y la anula. Esta es la causa más frecuente de ojo vago junto con la anisometropía.
Ambliopía por deprivación
Por catarata congénita (opacificación del cristalino o la lente natural del ojo), una ptosis (caída del párpado superior), o una opacidad en la córnea. Estas patologías impedirán el correcto desarrollo visual.
Ambliopía refractiva
Por defecto refractivo como la miopía, hipermetropía o astigmatismo de manera que la percepción de las imágenes es borrosa al existir un error en la graduación mal compensado.
Causas del ojo vago o ambliopía
Los motivos más frecuentes por los que se produce un ojo vago son:
• Estrabismo: alteración en la alineación de los ojos. Las imágenes que percibe el cerebro de ambos ojos no son coincidentes y para evitar la visión doble no presta atención a una de las imágenes y la anula. Esta es la causa más frecuente de ojo vago junto con la anisometropía.
• Anisometropía: es la diferencia de graduación entre un ojo y el otro ojo. Los familiares del niño no suelen notar nada extraño ya que su visión es normal.
• Ambliopía por deprivación. Por catarata congénita (opacificación del cristalino), una ptosis (caída del párpado superior), o una opacidad en la córnea. Estas patologías impedirán el correcto desarrollo visual.
• Errores refractivos. Por defecto refractivo como la miopía, hipermetropía o astigmatismo de manera que la percepción de las imágenes es borrosa al existir un error en la graduación mal compensado.
¿Cuáles son los principales síntomas?
La amblopía es un problema que no es fácil de detectar por los padres y suele detectarse en exploraciones rutinarias de la visión de ambos ojos por el pediatra o el oftalmólogo pediátrico.
Un niño con un ojo ambliope puede no presentar síntomas y manejarse con normalidad con la visión del otro ojo, de ahí la importancia de hacer una primera revisión oftalmológica entre los 3 y los 5 años a todos los niños.
Algunos síntomas de alarma que nos deben hacer consultar son detectar algún “tic” como parpadear constantemente, torcer la cabeza, acercarse mucho a los objetos, como por ejemplo para ver la tele, o si se le ponen rojos los ojos, entre otros.
Diagnóstico ¿Qué pruebas realizamos para detectar un ojo vago?
El diagnóstico de la ambliopía depende de la causa que lo haya provocado. La detección se realiza a través de un oftalmólogo pediatra en una revisión rutinaria a partir de los 3 años.
Para ello, al niño se le medirá la graduación para saber cuáles son las necesidades para su correcta visión, así como una evaluación de la motilidad ocular, los párpados y la parte anterior y posterior del ojo. Se suelen utilizar figuras en forma de letras, así como distintos dibujos durante esta consulta. Estas son algunas de las pruebas que el oftalmólogo especialista puede realizar:
• Dilatar pupilar para detectar posibles defectos refractivos (miopía, hipermetropía y/o astigmatismo).
• Evaluación de la agudeza visual entre ambos ojos.
• Análisis de la motilidad ocular donde se examinan los músculos oculares para comprobar su correcto funcionamiento.
• Análisis de la visión binocular (estereopsis).
• Dilatación pupilar mediante colirios ciclopléjicos para detectar posibles defectos refractivos (miopía, hipermetropía y/o astigmatismo).
Tratamiento de la ambliopía
El tratamiento de la ambliopía dependerá de la causa que lo provoque, actuando sobre ella. De ahí, la importancia de un diagnóstico y tratamiento precoz para evitar llegar a la edad adulta con este tipo de patología ocular.
En la actualidad disponemos de diversos recursos para tratar el ojo vago.
La primera medida efectiva para tratar el ojo vago es prescribir gafas (o lentes de contacto en algunos casos particulares) si se detecta un defecto de refracción para corregir la miopía, hipermetropía y/o astigmatismo.
Puede ser necesario también la oclusión ocular, tapando el ojo bueno con parches para hacer trabajar el ojo malo. También puede penalizarse el ojo sano de forma óptica mediante filtros que se aplican en las gafas.
Otra opción según los casos es aplicar colirios en el ojo sano, lo que produce visión borrosa en éste.
El tiempo necesario de la oclusión mediante parche o de los otros métodos dependerá del tipo de ambliopía del niño, así como de la causa y de su edad. En algunas ocasiones también se puede requerir una intervención quirúrgica para tratar diversas causas (estrabismos, cataratas, ptosis) que son el origen de la ambliopía.
Por su parte, en algunos centros oftalmológicos como en Oftalvist contamos con un Gabinete de Terapia Visual en donde optometristas formados en esta especialidad pueden realizar ejercicios con los niños que padezcan ojo vago estimulando así los músculos oculares en casos de convergencia insuficiente (incapacidad para mantener la función binocular: mantener los dos ojos trabajando juntos) y otro tipo de terapias de visión.
Nuevo tratamiento digital para la ambliopía
La ambliopía, también conocida como «ojo vago», consiste en la pérdida de visión de uno o ambos ojos por una falta de uso en el periodo de desarrollo visual. Por lo tanto, es una patología que comienza en la infancia y que si no es diagnosticada y tratada precozmente se prolongará irremediablemente en la edad adulta.
En Oftalvist contamos con un sistema (AmblyGo) que puede mejorar significativamente la agudeza visual y la visión en 3D tanto en niños como adultos que sufren de ambliopía. Se trata de un software innovador acompañado de un servicio personalizado de un optometrista por el que ya han sido tratados más de 4.000 pacientes en todo el mundo. De esta forma, se entrena al cerebro consiguiendo una visión binocular unánime y equilibrada.
Prevención
Desde las Clínicas Oftalvist recomendamos que la primera exploración oftalmológica se realice entre los 3 y 4 años de vida a fin de detectar precozmente cualquier patología que comprometa la visión del niño antes de empezar el calendario escolar que puedan perjudicar su aprendizaje. A partir de los 5 años es recomendable llevar a cabo revisiones anuales con el oftalmólogo.
Los padres en estos casos tienen un papel vital, así como los profesores, quienes pueden detectar cualquier alteración en la visión del niño. Incluso en algunas ocasiones podría hasta un rendimiento bajo escolar tener que ver con problemas de ojo vago.
Preguntas frecuentes
→ ¿Hasta qué edad puede tratarse la ambliopía?
La ambliopía u ojo vago puede tratarse en niños mayores de 7 años, aunque será más difícil su recuperación ya que lo habitual es detectarla a los 3-5 años. Existen casos en los que se puede intentar tratar hasta los 17 años mediante soluciones más intensivas.
→ ¿El ojo vago o ambliopía se cura?
Una vez que el niño ya ha pasado su etapa de desarrollo neurológico de la visión a los 8-9 años, la agudeza visual alcanzada en ese momento, ya sea con corrección óptica o sin ella, es la que va a tener toda su vida. Decimos que el niño tiene un ojo vago cuando pasada esta edad, y a pesar de haber corregido el defecto previo (estrabismo, catarata, defecto refractivo…), se sigue sin ver del todo bien. Antes de esa edad tenemos tiempo suficiente para poner los medios que eviten la ambliopía u ojo vago.
→ ¿Se puede corregir la ambliopía en adultos?
La corrección del ojo vago en adultos es muy complicada, pero según qué casos, no imposible. Dependerá de la valoración de su oftalmólogo especialista en cada caso en particular. Sin embargo, sí se puede actuar durante la infancia cuando el sistema visual todavía no está del todo desarrollado.
→ ¿Funciona el parche para tratar el ojo vago?
Sí. La oclusión ocular o el parche sirve para estimular la visión del ojo vago (tapando el ojo bueno). No será un tratamiento para corregir el estrabismo infantil.